lunes, 1 de agosto de 2016

La casa de Freud

En el 19 de la calle Berggasse en Viena se encuentra el Sigmund Freud Museum. El museo se ha instalado en esta casa en la que vivió y tuvo el consultorio Sigmund Freud. Estuvo aquí desde 1891 hasta 1938, cuando tuvo que abandonar Viena debido a su origen judío, tras la anexión de Austria por la Alemania de Hitler. El 4 de junio de 1938, Freud deja definitivamente la casa de Berggasse 19 en Viena, para irse a Londres, donde vivirá en el exilio el resto de sus días. 

La casa de Viena ahora es un museo que conserva muchas de sus pertenencias, tal y como estaban cuando el famoso psicoanalista vivia allí. La casa alberga el museo (Sigmund Freud Museum), una biblioteca especializada en la obra de Freud y en el psicoanálisis (Sigmund-Freud-Haus-Bibliothek), el archivo Freud, con una apreciable colección de documentos históricos, cartas y certificados (Sigmund-Freud-Archiv), y las oficinas de la secretaría de la Sociedad Sigmund Freud (Sigmund Freud Gesellschaft).

Durante la década de los años 30 el ayuntamiento de Viena consideró una propuesta de cambiar de nombre a la calle Berggasse para sustituirlo por  Sigmund Freud Gasse. Al final fue el propio Freud el que se opuso a la idea y el nombre de la calle se quedó como estaba.

La remodelación de la casa se llevó a cabo en 1971 con la ayuda de Anna Freud, la hija menor de Sigmund Freud. En la casa se encuentra el mobiliario original, incluyendo la sala de espera y el consultorio y una selección de la colección de antigüedades de Freud. También hay copias firmadas y primeras ediciones de sus obras, las cuales ofrecen una visión de la biografía de Freud, su entorno cultural y la evolución del psicoanálisis.

Tecnología en el lugar de la música

Este gigantesco cajón de cristal y aluminio, este edificio tan moderno, ocupa el número 95 de la calle Obere Donaustrasse, paralela al canal del Danubio en Viena. 

Mirándolo objetivamente, es posible que aquí dentro se encuentre el corazón tecnológico del futuro o quizás, mejor dicho, el cerebro con el que en breve pensará el mundo. Aquí se puede estar gestando la máquina inteligente que mañana tomará decisiones por nosotros, ya que este edificio es la sede central de IBM. 

El lugar da para una reflexión acerca de lo que será la situación de la humanidad a la vuelta de la esquina, máxime teniendo en cuenta que previamente el espacio de este gigantesco mamotreto estaba ocupado por la Casa de Baños de Diana, un local desaparecido de nombre poético que, además, fue escenario el 15 de febrero de 1867 de la ejecución por primera vez de El Danubio Azul, el genial vals de Johann Strauss.